
SUDCALIFORNIANOS DE HUESO COLORADO
Los paceños son muy celosos de su albergue. Cuando un viajero se aquerencia con el buen trato, lo invitan a probar las ciruelas silvestres del Mogote, aciduladas y sabrosas, – “El que come ciruelas del Mogote, ya no se va de aquí “, acostumbran a decir con frecuencia.